Hebreos 4:12
12 Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos; y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón.
Manantial de aguas vivas es la palabra de Dios, es viva, la palabra de Dios es Espiritu y vida, porque es poderosa para restaurar, renovar, purificar los corazones, es como jabón de lavadores, la palabra de Dios es viva y eficaz, es viva porque aquel verbo se hace carne, es decir que se hace realidad y es prosperada para lo cual ha sido enviada.
Jeremías 23:29
29 ¿No es mi palabra como fuego, dice Jehová, y como martillo que quebranta la piedra?
La palabra de Dios es como fuego que rompe cadenas, ataduras, opresiones de maldad y es como martillo porque quebranta el corazón más duro.
La palabra de Dios es poderosa, porque por medio de ella Dios nos enseña su voluntad, endereza nuestras pisadas, nos muestra la verdad, y esa verdad nos hace libre de todo pecado, de toda maldición, podemos entender la sabiduría de lo alto y discernir lo bueno y malo, por ello dice el Señor que es necesario que le conozcáis y entandáis.
En Jeremías 9:24
Jeremías 9:24
24 Mas alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme,que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Jehová.
Conocerle y entenderla al Señor mediante su palabra que ha sido escrito inspirada por el Espíritu Santo, es decir que no es palabra de sabiduría humana, si no del mismo Dios vivo. El Señor se complace al buscarle, en escudriñar las palabra, gloriese en esto que se debe gloriar en conocerle y entenderle, en eso si debemos gloriarnos, porque es lo mas importante, el conocer de su palabra porque la palabra es escudo para nuestras vidas, para defenderse del enemigo que va tratar de apartar a su pueblo del camino, cuando Jesús se encontraba en el desierto ayunando 40 días ( Mateo 4: 1-11), vino el diablo y le tentó, Jesús se defendió por medio de la palabra, le decía escrito esta, porque todos los argumentos y maquinaciones del enemigo son desechadas por el conocimiento de la palabra de Dios.
Pero El respondiendo, dijo: Escrito está: “No solo de pan vivira el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.”
Juan 5:39 39 Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí;
Juan 6:63
las palabras que yo os he hablado son espíritu y son vida.
La palabra es Espíritu y vida, la palabra de Dios tiene poder, tiene vida, rompe ataduras, mediante la palabra, Dios enseña, consuela, exhorta, cuando Dios nos enseña es porque da sabiduría a su pueblo, de cómo debemos de caminar el día a día sea con el prójimo, o en el caminar en las diferentes situaciones que se presenta en la vida cotidiana para vivir en paz, en armonía, en victoria por lo tanto en bendición.
Cuando empezé a leer la palabra, luz resplandeció en mi corazón, empecé a conocer a Dios y su voluntad, muchas preguntas y dudas pudo esclarecerse, cuando estudiaba en la universidad tenía muchas dudas sobre de dónde venimos y a donde vamos, me enseñaron sobre el materialismo y idealismo pero me sentía muy confundida, todavía no me habían predicado acerca de la verdad y eso yo anhelaba, en mi salón de clase había una compañera que era cristiana, pero nunca me predico, ahora me pregunto ¿porque no me predico?, entiendo que por eso es necesario predicar, hay muchas personas que desean saber la verdad, pero a veces callamos.
La palabra consuela, anima, da nuevas fuerzas, fortalece, muchas veces que leo la palabra, primero pidiendo al Espíritu Santo que me de entendimiento y me guié a toda verdad, Dios habré mis ojos espirituales y puedo entenderlo y conocerlo, luego siento una paz, porque la palabra es Espíritu y Vida, siento un renacer , nuevas fuerzas.
Es la palabra el sustento espiritual, que como el alimento natural que es para vivir, la palabra también nos sostiene, y aumenta la fe, endereza nuestros pasos.
Salmos 1
Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malos,
Ni estuvo en camino de pecadores,
Ni en silla de escarnecedores se ha sentado;
2 Sino que en la ley de Jehová está su delicia,
Y en su ley medita de día y de noche.
3 Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas,
Que da su fruto en su tiempo,
Y su hoja no cae;
Y todo lo que hace, prosperará.
Amen